Si algo nos preocupa a las madres y padres de familia es el saber si estamos educando correctamente a nuestros hij@s. Y no es para menos, nadie nos prepara para esa inmensa responsabilidad de convertirnos en cuidadores de un pequeño ser humano. Nadie habla de la letra chiquita que acompaña la labor de ser formadores y las dudas que se presentan a lo largo de las diferentes etapas del desarrollo de estas pequeñas personitas.
Sin embargo, los estilos de crianza y su influencia en el desarrollo infantil han sido motivo de estudio en el campo de la psicología, basta con recordar la revolucionaria Teoría del Apego que ofreció el psicólogo John Bowlby a finales de los años 60 y que continúa siendo de interés -incluso alcanzando mayor auge- en nuestros días.
Esta semana, tuvimos la oportunidad de asistir a una charla virtual impartida por la maestra Lorena Giacomán Arriata, asistente de educación de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús, titulada "Estilos educativos familiares".
Durante la hora en la que se desarrolló la transmisión que puedes ver aquí, la maestra Lorena abordó los cuatro estilos principales de crianza que se viven al interior de los hogares, mencionando las consecuencias que resultan de cada uno. Algo muy importante que recalcó fue que las madres y los padres no siempre utilizan uno solo, sino que puede haber una mezcla entre varios que varía de acuerdo al contexto, los cambios sociales, los valores, el momento evolutivo de los menores, entre otros.
A continuación, te compartimos las características principales de cada estilo, ¿con cuál te identificas más?
Estilo AUTORITARIO
+ Normas abundantes y rígidas
+ Exigencia sin razones
+ Más castigos que premios
+ Críticas a la persona
+ Poco control de impulsos de las personas adultas
+ No diálogo ni negociación
Estilo PERMISIVO
+ Sin normas o no las aplican
+ Mucha flexibilidad en horarios, rutinas
+ Evitan conflictos, dejan hacer
+ Delegan en otros la educación de los niñ@s
+ Ni premios ni castigos: indiferencia
+ No hay modelos de referencia
Estilo DEMOCRÁTICO
+ Normas claras y adecuadas a la edad
+ Uso razonable de premios y castigos
+ Uso del refuerzo verbal positivo
+ Estímulo de autonomía e independencia
+ Control externo - control interno
+ Uso del diálogo y la negociación
Estilo NEGLIGENTE
+Concesión de todos los deseos
+ Pocas normas o no se aplican
+ Excesivos premios, no castigos
+ Justifican todos los errores
+ Intento de evitar todos los problemas
Entre las consecuencias que se reflejan de cada estilo, se encuentran:
Estilo AUTORITARIO: Rebeldía por impotencia, actitud de huída o engaño, rigidez, baja autoestima y escasa autonomía, agresividad y/o sumisión.
Estilo PERMISIVO: Inseguridad, inconstancia, falta de confianza en sí mismos, bajo rendimiento escolar por no esfuerzo, baja tolerancia a la frustración, cambios frecuentes de humor.
Estilo DEMOCRÁTICO: El único sin consecuencias negativas, alta autoestima, competencia y habilidad social, autocontrol, autonomía, recompensas a largo plazo.
Estilo NEGLIGENTE: El más perjudicial. Dependencia, escaso autocontrol, baja tolerancia a la frustración, inseguridad, baja autoestima, actitudes egoístas.
Igual de esencial es entender, de acuerdo a la maestra Giacomán, las dimensiones que tienen en común todos los estilos y que siempre están presentes: AFECTO - COMUNICACIÓN - CONTROL - DISCIPLINA
Así, los padres y madres debemos saber que "la comunicación y el afecto no están reñidos con la exigencia y el control", es decir, las normas y límites son fundamentales en la vida de los hij@s para:
+ Aprender hábitos y conductas adecuadas.
+ Desarrollar sentimientos de autonomía y seguridad en sí mismos.
+ Sentir que tienen una guía/acompañamiento en el crecimiento.
+ Desarrollar sentido de pertenencia a la familia y sociedad.
+ Desarrollar de autoestima, autocontrol y autorregulación.
Finalmente, nos compartieron 10 reglas para "reconvenir" de forma asertiva que te compartimos en esta imagen interactiva:
Platícanos, ¿qué herramientas te han ayudado en tu labor de formador/formadora?